¿Por qué duelen las rodillas del ciclista?
Las rodillas son uno de los elementos más sensibles de los ciclistas. Si no se cuidan correctamente pueden producir dolor y molestias. Una mala configuración de nuestra bicicleta, malos hábitos o caídas pueden afectarnos. Es una de las lesiones más comunes . El dolor de rodilla es algo que debemos vigilar y solucionar. Entorno a un 25% de los ciclistas sobre dolor de rodilla alguna vez en la temporada, según el estudio de la American Journal of Sports Medicine.
Es importante establecer la distinción entre las lesiones producidas por entrenar mucho y por traumatismos. Las lesiones traumáticas son el resultado de un mecanismo muy diferente y también se tratan de manera muy diferente. Las lesiones por uso excesivo surgen de las repeticiones de movimientos que hacemos en nuestros entrenamientos.
Tipos de dolor de rodilla
– Dolor en la parte posterior de la rodilla. Lo más frecuente es que el sillín esté demasiado alto.
– Dolor en la parte externa de la rodilla. Frecuentemente está causado por la fricción de la cintilla iliotibial. Suele ocurrir si el sillín está demasiado alto, aunque también una incorrecta colocación de las calas puede generar este tipo de molestia si los talones van demasiado separados de las bielas.
– Dolor en la parte anterior de la rodilla. Es el más frecuente entre los ciclistas. Generalmente está asociado a sillines demasiado bajos y/o adelantados, así como a calas muy adelantadas. Existe una excesiva flexión de la rodilla.
– Dolor en la cara interna de la rodilla. Suele presentarse cuando el sillín está demasiado bajo o cuando la cala está mal colocada y no permite al ciclista llevar los pies paralelos a la biela. También con pedales o calas que dan un exceso de libertad al pie.
¿Cuáles son las principales causas de las lesiones de rodilla?
Se pueden dividir en tres categorías:
1- Específicas del ciclismo
Estas pueden deberse a aquellos entrenamientos que exigen más a las rodillas de lo que deberían. Se producen por incremento de las cargas de trabajo, usar cadencias muy bajas, aumento de las intensidades sin estar preparado o subir muchos puertos. Es necesario dar al cuerpo la adaptación necesaria. Incrementos muy bruscos sin estar debidamente preparados pueden dar lugar a dolor de rodilla.
Solución: debemos rebajar la intensidad de nuestro entrenamiento y hacer cargas progresivas. Lo ideal es aumentar la carga entorno a un 10-15% semanal. Para ellos sería interesante que llevases un diario de entreno.
2- Por causas de la bicicleta
Otro de los más comunes. Llevar la bicicleta mal ajustada es una de las causas fundamentales que nos provoca molestias en las articulaciones. La altura del sillín, su retroceso, la longitud de las bielas o mal ajuste y alineación de los pedales (o desgaste de los mismos), son claves en ente tipo de lesiones. Si eres nuevo en el ciclismo o no tienes claros tus ajustes te recomendamos hacer un estudio biomecánico que te corrija todos estos defectos. Gastarás el dinero pero ganarás en salud.
Solución: Si no puedes hacer un estudio biomecánico debes optar por la solución de «prueba y error». Has de ir configurando tu bici poco a poco hasta dar con el problema. Es importante que anotes cuales son los cambios que has hecho para luego acordarte y no volver a repetirlos. Las calas con mayor giro lateral son una buena opción.
3-Causas relativas al ciclista
El dolor de rodilla en estos casos se produce por causas que tiene que ver con el propio cuerpo del ciclista. Desequilibrios musculares, antiguas lesiones, diferencias de longitud o arqueo de las piernas…son las principales causas.
Solución: es la más difícil de tratar porque en ocasiones puede no tener solución. Al mismo tiempo también es la más dificil de diagnosticar. Siempre solemos empezar a hacer cambios en la bici para tratar de aliviar el dolor de rodilla. Por tanto, si la reducción de cargas no te funciona y has probado a reajustar la bici de todas las formas posibles lo mejor es que acudas a un médico especialista que diga cual puede ser el problema.
Ante cualquier dolor de rodilla hay que saber escuchar al cuerpo y parar. No sirve de nada entrenar con dolor. Sólo agravamos el problema. Si tienes la bici perfectamente ajustada y no padeces este tipo de lesiones eres afortunado. Aún así para poder aliviar tensiones en ellas generadas por los entrenamientos una buena sesión de fisioterapia no viene mal.
Las rodillas son una parte muy sensible del cuerpo de los ciclistas. Molestias en ellas pueden hacer que nuestras salidas sean una tortura. Cuidalas y tus rodajes serán más felices.
