Los geles deportivos son parte de la nutrición ciclista desde hace años. Su comodidad, su aporte energético, su eficacia… Hacen de ellos la solución perfecta para tomar energía. Los ciclistas, como deportistas de resistencia, debemos alimentarnos mientras entrenamos. Aquí influye mucho las características del entrenamiento, la intensidad, el ciclista… Como regla general podemos decir que cada 45-60 minutos debemos ingerir algún alimento o gel. Lo óptimo es combinarlos. Jamás debemos olvidarnos de beber, que tan importante o más que comer. En este artículo vamos a abordar el tema de los geles deportivos. Por qué se han vuelto tan populares y cuál es su aporte al ciclista.
¿Qué son los geles deportivos?
Los geles deportivos no dejan de ser un «jarabe» de glucosa (azúcar) altamente concentrada. En ocasiones pueden llevar alguna otra sustancia, como la cafeína, magnesio, beta-alanina. Los geles están concebidos para aportar al cuerpo una gran cantidad de energía en forma de hidratos de carbono de rápida absorción. Esta es la clave, lo rápido que el cuerpo es capaz de transformar el gel en energía.
¿Cómo funcionan los geles?
Una vez que nos tomamos un gel, la rapidez con la que el cuerpo lo metaboliza es muy alta. Esta es la clave de los geles. No se pueden establecer reglas fijas sobre cuánto tiempo tarda el cuerpo en digerirlo. Por regla general, podemos decir que se pueden tardar sobre 20 minutos. Esto nos sirve para hacernos una idea pero cada persona digiere los azúcares de forma diferente.
La cantidad de geles que debemos tomar depende del tipo de entrenamiento que hagamos. La intensidad y la duración son muy importantes. Un gel de 30 gramos puede dar un aporte de energía suficiente para unos 30 minutos aproximadamente. Decimos aproximadamente ya que no es lo mismo si tomamos un gel y estamos rodando muy tranquilos, que si estamos subiendo un puerto.
¿Con qué frecuencia tomar los geles?
Lo más importante cuando nos alimentamos sobre la bici, es no llegar a entrar en «pajara». Debemos estar alerta a las señales de alerta que nos da el cuerpo. Si esperamos a sentirnos con hambre, estómago vacío, mareos… Significa que hemos esperado demasiado.
Otro error típico es tomar el gel cuando estamos en plena subida a máximo esfuerzo. Si tenemos en cuenta que el gel tarda un tiempo en hacer efecto, cuando lo haga, ya estaremos bajando. Otro problema asociado es que el cuerpo necesita mandar sangre al estómago para hacer la digestión. Mientras esta trabaja para digerir el gel no está en las piernas pedaleando.
La frecuencia con la que tomar geles tiene otro elemente importante. No todos los cuerpos queman energía de la misma forma. Hay ciclistas que tiran más de grasas y otros de azúcares. Los primeros necesitarán ingerir menos energía durante el entrenamiento que los segundos. Es difícil saber qué tipo de ciclista somos. Como regla general, a partir de un 80% de nuestra frecuencia cardíaca máxima los deportistas gastan azúcar. Esto eso lo normal. Sin embargo, recientes estudios han descubierto que hay personas que pueden quemar grasa hasta un 89 € de la FCM. Debido a que es complicado saber si somos de estos últimos, es mejor prevenir que curar. La norma dice que debemos tomar sobre 60-90 gramos de hidratos por hora. Debemos combinar sólidos, geles y siempre tomar agua.
A pesar de que hemos dado una serie de pautas generales, en el tema de la nutrición cada persona es un mundo. No queda otra solución que hacer pruebas. Cada ciclista ha de saber qué tipo de gel le va mejor (no todos se digieren igual), cual es la mejor forma de tomarlo y cuantos ha de tomar.
